Por Redacción El
Tras la confirmación del partido de preparación a la Copa Oro entre México y Honduras el próximo 12 de junio en la ciudad de Atlanta, muchos se han cuestionado si vale la pena sostener este duelo debido al juego brusco que han sostenido ambas Selecciones en los diferentes escenarios.
La más reciente fue la lesión sufrida por el jugador mexicano Sebastián Córdova en la Final del pre-olímpico 2021 de Concacaf que por un pisotón ha estado fuera de circulación con el América en la Liga MX. También se ha recordado la lesión en la clavícula de Javier “Chicharito” Hernández en un amistoso en 2015, misma que lo marginó de aquella edición.
Sin embargo, del lado catracho y una de las lesiones más impactantes que se tengan en la memoria, es la vivida por Luis Garrido quien sufrió rotura de los seis ligamentos de la rodilla derecha debido a una caída de Javier Aquino sobre su pierna y misma que se flexionó de manera inversa y a pesar de la pronta cirugía y una larga recuperación no sanó en su totalidad.
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Así mismo, en la misma Final del pre-olímpico 2021, el capitán Denil Maldonado terminó con una rotura del ligamento lateral del tobillo derecho tras diputar el balón con JJ Macías.
Ambas aficiones también recordarán sendos juegos intensos durante las eliminatorias mundialistas, partidos en Copa Oro o bien los llamados amistosos donde la pasión, la añeja rivalidad y los deseos de salir victoriosos hacen que las marcas defensivas sean desmedidas y han dejado manchas que el deporte no quisiera ver.
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