Por Javier Vaca
El delantero mexicano, Hirving Lozano, estuvo 63 minutos dentro del terreno de juego donde tuvo dos opciones claras de peligro. La del primer tiempo con golpe de cabeza y la segunda en una jugada en que el balón no le llegó cómodo al Chucky y le golpeó en el abdomen.
Tras no poder definir de manera correcta el esférico, Luciano Spalletti se agarró la cabeza y arengó con sus manos tras ver como Hirving Lozano no pudo concretar la jugada que hubiera sido el empate para el Napoli. Tras la salida del Chucky cayó el segundo del partido tras desconcentraciones en la defensa italiana.
A Hirving Lozano le costó meterse en el partido pues Lorenzo Insigne generaba solo juego por la banda zurda. El Chucky tuvo que interactuar como mediapunta donde tuvo las dos jugadas claras. Lozano funciona más por las bandas, pero buscó opciones de peligro desde el centro e incluso se metió a la izquierda con el fin de tener el balón en sus pies.
El problema de Hirving Lozano radicó en la poca distribución que tuvo del esférico dado que el juego solo apostaba hacia el costado izquierdo para Lorenzo Insigne. hasta el propio delantero nigeriano Víctor Osimhen le tocaba salirse del área para tratar de buscar opciones dado que Insigne no centraba y solo remataba hacia el arco contrario.
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