Por Javier Vaca
Una los mejores recuerdos que tenemos del mundial sub-17 en el que México se coronó campeón fue la espectacular chilena de un pequeño joven que tenía vendada la cabeza tras un fuerte golpe, su nombre Julio Gómez.
Desde ese triunfo y de la forma que lo hizo, su apodo sería el de ‘Momia’. Fue durante la semifinal del torneo mundial cuando México se enfrentó a la poderosa Alemania, el partido iba igualado 2-2 y tras un fuerte golpe que recibió en la cabeza, Gómez decidió entrar y puso el 3-2 definitivo con su acrobático gol que le daría el pase a la final al Tri.
Ahora en la actualidad el jugador se mantiene activo en la Liga de Balompié Mexicano, su actual equipo es el Real San José, y este miércoles en el debut de su club se lo volvió a ver en acción pero con muchos kilos encima. Al parecer los años no lo han tratado bien desde aquel mundial.
Salido de la cantera del Pachuca, parecería que su destino estaba en Europa, pero no fue así. Ahora se mantiene activo en la segunda división mexicana y lo más curioso, dirigido por el mismo entrenador que le dio la gloria con el Tri, Raúl Gutiérrez.
22/12/2024
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