Fue campeón con Tigres, le hizo gol a Rayados, ahora construye iglesias

Énner Valencia, el artillero que deslumbró en la final del fútbol mexicano, donde su penalti fue decisivo para la victoria de Tigres, ha sorprendido al mundo con una faceta poco conocida de su vida. Más allá de los goles y las ovaciones, el delantero ecuatoriano dedica una parte significativa de sus ganancias a la construcción de iglesias en su país natal.

Un gol que marcó historia y un compromiso que trasciende

Su penalti en la final regia no solo le valió un título, sino que también lo posicionó como uno de los máximos goleadores del torneo. Sin embargo, detrás de la euforia y la celebración, Valencia llevaba consigo un compromiso mucho más profundo: el de ayudar a su comunidad a través de la fe.

"El fútbol me ha dado mucho, pero también siento la responsabilidad de devolver algo. Construir iglesias es una forma de expresar mi gratitud y de ayudar a las personas a encontrar un lugar donde sentirse en paz y conectados con Dios", expresó el delantero en una entrevista reciente.

Un proyecto que crece

El proyecto de construcción de iglesias de Énner Valencia ha ido tomando forma a lo largo de los años. El jugador ha destinado una parte importante de sus ingresos a la adquisición de terrenos, la contratación de arquitectos y la compra de materiales.

"Mi objetivo es construir iglesias en diferentes comunidades de Ecuador, especialmente en aquellas zonas más necesitadas. Quiero que las personas tengan un lugar donde puedan orar, reflexionar y encontrar esperanza", afirmó el futbolista.

El ejemplo de un deportista comprometido.

La iniciativa de Énner Valencia es un ejemplo de inspiración para otros deportistas y figuras públicas. El delantero ecuatoriano demuestra que el éxito deportivo puede ir de la mano con un compromiso social y una fe profunda.

Su historia ha conmovido a miles de personas en Ecuador y en el mundo entero, quienes admiran su generosidad y su deseo de ayudar a los demás.

El futuro del proyecto

El proyecto de construcción de iglesias de Énner Valencia es una obra en constante evolución. El jugador tiene grandes planos para el futuro y espera poder construir cada vez más templos en diferentes partes de Ecuador.

"Quiero que este proyecto sea sostenible en el tiempo. Por eso, estoy trabajando en la creación de una fundación que se encargue de administrar los fondos y de garantizar la continuidad de las obras", aseguró Valencia.

Un legado que trasciende el fútbol.

Más allá de su carrera futbolística, Énner Valencia está construyendo un legado que perdurará en el tiempo. Su compromiso con la construcción de iglesias es una muestra de su humildad y de su fe en un futuro mejor para su país.

El delantero ecuatoriano ha demostrado que el deporte puede ser una herramienta poderosa para hacer el bien y para transformar la vida de las personas.