La participación de los equipos de la Liga MX en la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana solía ser un evento emocionante tanto para los clubes como para los aficionados en México. Sin embargo, desde hace varios años, los equipos de la liga dejaron de competir en estos prestigiosos torneos organizados por la CONMEBOL (Confederación Sudamericana de Fútbol) debido a diferencias, y una combinación de factores que van desde regulaciones internacionales hasta desafíos logísticos.
Una de las principales razones por las que los equipos mexicanos dejaron de participar en las competencias de la CONMEBOL, es por el endurecimiento de las regulaciones de la FIFA. Desde que se implementaron nuevas normativas, la FIFA ha buscado evitar que los clubes participen en torneos organizados por diferentes confederaciones continentales. Esto significa que los equipos de la CONCACAF (Confederación de Fútbol de América del Norte, Centroamérica y el Caribe), como los de la Liga MX, deben priorizar las competencias organizadas por su propia confederación, como la Liga de Campeones de la CONCACAF.
Estas regulaciones han complicado la participación de los clubes mexicanos en la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, debido a la necesidad de cumplir con los requisitos de FIFA y evitar sanciones.
Además de las restricciones impuestas por la FIFA, los calendarios superpuestos entre torneos locales, internacionales y regionales se han convertido en un desafío para los clubes de la Liga MX. La coincidencia de fechas entre la Liga MX, la Liga de Campeones de la CONCACAF y los torneos de la CONMEBOL hacen prácticamente imposible que los equipos mexicanos puedan competir en todas estas competencias sin afectar su rendimiento en alguna de ellas.
Otro factor determinante en la salida de los equipos mexicanos de los torneos sudamericanos fue el acuerdo entre CONCACAF y CONMEBOL en 2016. Este acuerdo priorizó la participación de los clubes mexicanos en las competencias organizadas por la CONCACAF, como la Liga de Campeones, sobre la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana. El objetivo era fortalecer las competencias a nivel regional, permitiendo que los equipos de la Liga MX se enfocaran en los torneos de América del Norte, Centroamérica y el Caribe.
Si bien la decisión de retirarse de la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana permitió a los equipos mexicanos simplificar sus calendarios y optimizar sus recursos, muchos aficionados aún sienten nostalgia por las épicas batallas que los clubes mexicanos protagonizaban en estos torneos sudamericanos. La Copa Libertadores, en particular, ofrecía un gran prestigio y era vista como una oportunidad para medir el nivel del fútbol mexicano frente a algunos de los mejores equipos del continente.
Aunque la posibilidad de que los equipos de la Liga MX regresen a la Copa Libertadores o la Copa Sudamericana ha sido un tema recurrente en los últimos años, las actuales regulaciones de la FIFA y las prioridades de la CONCACAF hacen que este regreso sea, por ahora, improbable. Los clubes mexicanos seguirán enfocados en las competiciones de su región, mientras los aficionados continúan soñando con volver a ver a sus equipos compitiendo en el escenario sudamericano.
21/12/2024
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