Liga MX

Alcanzó el campeonato en México a pesar de las dificultades de la vida, ahora quiere ser Campeón Olímpico

La historia de Luis Romo ha tenido una serie de altibajos, pero su constancia y sus deseos de superación lo pueden llevar a conquistar una medalla olímpica.

Por Luis Aveleyra

La historia de Luis Romo ha tenido una serie de altibajos, pero su constancia y sus deseos de superación lo pueden llevar a conquistar una medalla olímpica.

En Cruz Azul, no sólo se puede mencionar de cómo fue el camino para alcanzar el 9o título en su vida después de 23 años de fracasos. En el interior del equipo también hay historias que son dignas de contar donde la superación y los deseos de triunfar pueden llevar a una persona de la escasez de una infancia a la gloria de un profesional. 

Así ha sido el camino que ha recorrido Luis Romo, un pequeño pescador que ayudó a su familia a generar ingresos, pero mañana será un jugador olímpico que buscará conquistar la medalla de oro en los Juegos de Tokio 2020-1. En el trayecto hubo desilusiones, desconfianza, pero en el clímax de la historia siempre hay momentos que la vida misma compensa todos los sacrificios. 

Nacido en el pequeño poblado de Ahome, Sinaloa, Luis Romo creció dentro de una familia que se dedicaba a la pesca de ostión para su venta. Los ingresos no eran muchos, pero para él era suficiente para comprarse un balón de fútbol. Su inspiración fue el “Cabrito” Arellano y hasta decían que tenía parecido con el delantero del Monterrey.

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A la edad de 15 años, emprendió el viaje a la Ciudad de México para hacer pruebas deportivas. Gracias al papá del “Chuletita” Orozco ingresó a las fuerzas básicas del Cruz Azul, pero el sentimiento por estar lejos de su familia le impidió desarrollarse técnica y físicamente. Por lo cual cortaron su proceso. Buscó acomodo en Chivas, pero también fue rechazado hasta que el Querétaro lo recibió en 2018 gracias al apoyo de su hermano Darío.

Hoy Luis Romo dejó a un lado el oficio de pescador y recolector de ostiones para dedicarse al fútbol. Con perseverancia alcanzó la meta de jugar en Primera División y su talento lo llevó de regreso al Cruz Azul para conseguir el Campeonato. La vida lo ha recompensado con ser refuerzo de México para los Juegos Olímpicos y espera la gloria de su vida y convertirse en campeón olímpico.

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