Por Ricardo Camacho
El Club Deportivo Cruz Azul sigue dando salidas a jugadores que ya no cuentan para la directiva, ni entran en los planes de Juan Reynoso, entrenador de La Máquina. Llegaron a separar jugadores para que entrenaran con el equipo sub 20.
Alexis Gutiérrez, Jaiber Jiménez y Lucas Passerini fueron separados del primer plantel y fueron enviados a entrenarse con el segundo equipo de Cruz Azul. ‘Guty’ ya salió del equipo rumbo al Tapatío en la Liga de Expansión. Jiménez sigue en el equipo, y Passerini también va de salida.
De acuerdo a Armando Melgar del Diario Récord, La Máquina rescindió el contrato del delantero argentino, que una vez roto su contrato, pasará a jugar de nuevo en el fútbol chileno, que es de donde llegó en enero de 2020, aunque aquella ocasión fue desde el Palestino.
Según Melgar, jugará para el Club Unión Deportes la Calera, por el que firmará como agente libre, volviendo así al fútbol en el que destacó, y convenció a Cruz Azul de hacer una inversión importante en él como delantero, esperando que fuera un competidor a Jonathan ‘Cabecita’ Rodríguez.
No está confirmado de manera oficial que se rompió el contrato, sin embargo, es común que en el fútbol mexicano no hagan anuncios formales para otra cosa que no son refuerzos o salidas. Hay clubes que ni confirman las renovaciones de sus jugadores, como si pasa en la gran mayoría de ligas del deporte, no sólo de futbol.
Después de apenas 30 partidos en el CD Palestino de Chile, donde jugó 30 partidos, anotó 16 goles y sumó 5 asistencias, Cruz Azul pagó menos de 3 millones de dólares, por lo que en su momento era el goleador de la Liga chilena, e iba a ser un competidor del puesto con el ‘Cabecita’ Rodríguez.
En tres etapas distintas como cementera, jugó 18 partidos, anotando apenas 4 goles, y dando 1 asistencia. Además de La Máquina, pasó por Necaxa, donde hizo 3 goles, y San Luis, donde no marcó ni un gol.
En 44 partidos en la Liga MX y Liguilla, jugó un total de 44 partidos en suelo mexicano, anotando apenas 7 goles. Números pésimos para cualquier delantero, más para uno que costó unos 3 millones de dólares.
Además de ser un problema de un jugador cuya calidad es evidentemente baja para la Liga MX, Passerini era un problema para Cruz Azul por su formación como jugador, que fue fuera de México, creciendo en Argentina.
La Liga MX solo permite un total de 10 jugadores no formados en México para las inscripciones de cada torneo. Passerini y Pol Fernández eran parte de esos 10 jugadores no formados en México, e impedían el fichaje de más extranjeros.
Ahora con la salida de ambos futbolistas, Passerini siendo el último, liberan esas plazas de jugadores no formados en México, para inscribir sin problemas a los refuerzos extranjeros que llegaron a las filas de Cruz Azul este torneo.
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