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El del América que ya es de los que más títulos tiene en la Liga MX y solo ha jugado 40 minutos, no es Lichnovsky

Este futbolista puede presumir un palmarés envidiable en México

Por Luis Antonio Zamora

Este futbolista puede presumir un palmarés envidiable en México
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El juvenil Patricio Salas puede presumir el ser parte del Tricampeonato del América ya que ha estado en las celebraciones recientes del equipo y con esta etapa dorada con André Jardine como técnico, ya se colocó como el quinceavo jugador con más títulos en la historia de la Liga. MX, aunque solamente ha jugado 40 minutos en primera división.

El Tricampeonato del América: Un hito en la historia del fútbol mexicano

El Club América, uno de los equipos más grandes y prestigiosos del fútbol mexicano, alcanzó uno de los logros más significativos de su historia al conquistar el tricampeonato en el torneo de la Liga MX. Esta hazaña, que se dio entre 1983 y 1984, se consolidó al América como una de las potencias indiscutibles del fútbol mexicano y dejó una huella imborrable en los corazones de sus aficionados. El tricampeonato no solo fue una demostración del dominio deportivo del club en esa época, sino que también reafirmó su liderazgo en el ámbito nacional e internacional.

La era dorada de América

El período que abrió el tricampeonato de América estuvo marcado por una era dorada para el club. Durante los años 80, el América no solo era un referente en la Liga MX, sino que también destacaba a nivel internacional. Con jugadores de gran calidad, una plantilla equilibrada y un cuerpo técnico sólido, el club capitalino construyó un equipo que se convirtió en sinónimo de éxito y prestigio.

En ese contexto, la América vivió una época de gran esplendor. Su plantel estaba conformado por jugadores de renombre, muchos de ellos considerados leyendas del fútbol mexicano. En la defensa, figuras como Guillermo Hernández y Nacho Ambriz ofrecían seguridad, mientras que en el mediocampo y la delantera, elementos como Luis Roberto Alves "Zague", Carlos Reynoso y el colombiano Antonio de la Torre fueron fundamentales en la consecución de títulos.

La dirección técnica de la época estuvo a cargo de varios entrenadores, pero fue en la gestión de Luis Fernando Tena donde se consolidó este ciclo triunfal. Bajo su mando, el equipo se mostró competitivo y bien estructurado, con un estilo de juego que se distinguió por su solidez defensiva y su capacidad para atacar con eficacia. Tena logró transmitir a sus jugadores la mentalidad ganadora que llevó al club a ganar tres títulos consecutivos.

El primer campeonato: Invierno 1983

El primer título del tricampeonato llegó en el torneo de Invierno de 1983. El América demostró su superioridad durante toda la temporada, destacando no solo por su poder ofensivo, sino también por una defensa sólida que les permitió mantenerse en la parte alta de la tabla. En una final muy disputada, el equipo capitalino logró vencer al Guadalajara, uno de sus máximos rivales, en una serie que se convirtió en un clásico inolvidable.

El gol de la victoria fue anotado por el delantero mexicano Carlos Reynoso, quien en ese entonces se encontraba en el mejor momento de su carrera. El equipo de América vendió su primer campeonato de la mano de un plantel que había logrado una gran química, convirtiéndose en una verdadera máquina de fútbol. La victoria sobre el Guadalajara no solo significó el primer título del tricampeonato, sino que también representó una afirmación de la supremacía del América en el fútbol mexicano.

El segundo campeonato: 1984

En 1984, el Club América ratificó su dominio en el fútbol mexicano al ganar su segundo campeonato consecutivo en la temporada 1983-84. A pesar de los cambios que presentaron en la plantilla, el América mantuvo su alto nivel de juego y superó los desafíos con determinación. En esta ocasión, el rival en la final fue el Atlético Morelia, y el equipo logró imponerse con gran autoridad.

El partido final fue una muestra de la superioridad técnica y táctica de los jugadores del América, quienes, dirigidos por Tena, jugaron con inteligencia y calidad. La conclusión final con un marcador contundente que dejó claro que el América no solo había llegado para quedarse, sino que había logrado consolidarse como el mejor equipo de la liga. Con esta victoria, el América se coronó campeón por segunda vez consecutiva, y el título reafirmó su posición como el club más dominante en México en ese momento.

El tricampeonato: 1984-1985

El tercer campeonato del tricampeonato del América llegó en la temporada 1984-85, cerrando de manera espectacular una de las etapas más brillantes de la historia del club. El equipo continuó mostrando su calidad, pero también su capacidad de resiliencia, ya que enfrentaron desafíos tanto dentro como fuera del campo. En esta ocasión, el rival en la final fue el Atlético Potosino, un equipo que, aunque no tan popular, ofreció una dura competencia.

La serie final fue cerrada, pero el América demostró una vez más su capacidad para jugar en equipo y manejar los momentos de presión. El equipo se coronó campeón con un juego ordenado, en el que las individualidades brillaron, pero también se hizo evidente el trabajo colectivo. Con el gol decisivo de "Zague", el América se consagró como tricampeón de la Liga MX, un logro que quedó en la historia del club y del fútbol mexicano.

El legado del tricampeonato

El tricampeonato del América no solo es recordado por los títulos en sí, sino también por el legado que dejó en el club y en sus aficionados. Esta serie de campeonatos se consolidó en América como el club más exitoso de la época y marcó una pauta de excelencia que perduró por décadas. A partir de entonces, el América no solo fue un referente en México, sino también un equipo que se mantenía como uno de los principales contendientes en cualquier torneo en el que participara.

El tricampeonato también sentó las bases para futuras generaciones de jugadores que se inspiraron en ese éxito. La historia del América en los años 80, marcada por ese dominio absoluto, sigue siendo un ejemplo para los jugadores y entrenadores que buscan replicar el éxito y la calidad de aquella era dorada.

Conclusión

El tricampeonato del América es uno de los logros más emblemáticos y celebrados en la historia del fútbol mexicano. Este hito no solo destaca por la cantidad de títulos obtenidos en un corto período, sino también por la calidad de juego que el equipo desplegó, la solidez de su plantilla y la consistencia en su rendimiento. La hazaña del América en los años 80 sigue siendo un punto de referencia para los aficionados al fútbol y un recordatorio del legado perdurable de uno de los clubes más grandes del continente.


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