Ni Querétaro ni Puebla, peor CU, el estadio donde Cruz Azu podría jugar de local, le gusta a Martín Anselmi

Martín Anselmi. En una reciente entrevista con El Futbolero, nuestro director técnico soltó una bomba que ha resonado en los pasillos de La Noria y entre la afición: el estadio que más le gusta de México es el BBVA. Sí, el Gigante de Acero, la casa de los Rayados de Monterrey, ese mismo que albergará la final del Torneo Apertura 2024 entre Rayados y el América. ¡Vaya declaración!

Esta confesión, mis estimados cruzazulinos, nos abre un panorama fascinante. Recordemos que, ante la inminente remodelación del Estadio Ciudad de los Deportes, la directiva de Cruz Azul se encuentra en la búsqueda de una casa temporal. Se han barajado diversas opciones, desde Querétaro y Puebla, hasta el mismísimo Estadio Olímpico Universitario, casa de nuestros odiados rivales, los Pumas de la UNAM. Sin embargo, las palabras de Anselmi nos hacen pensar que la directiva podría estar considerando otras alternativas, quizá incluso más ambiciosas.

Entendamos el contexto. Martín Anselmi es un hombre de fútbol, un estratega que vive y respira este deporte. Su gusto por el BBVA no es casualidad. Se trata de un estadio de primer nivel, con una infraestructura moderna, una cancha impecable y un ambiente que impone. Es un escenario digno de un equipo grande como Cruz Azul, un equipo que aspira a lo más alto. Y si nuestro técnico se siente cómodo en un lugar así, ¿quiénes somos nosotros para negarle esa posibilidad?

La idea de jugar en el BBVA, aunque remota por la logística y la distancia, nos plantea una pregunta interesante: ¿qué busca Cruz Azul? ¿Conformarse con una sede temporal que simplemente cumpla con los requisitos, o buscar un espacio que impulse al equipo, que lo motive, que lo haga sentir como en casa, incluso fuera de la capital? Las palabras de Anselmi nos sugieren que la directiva podría estar inclinándose por la segunda opción.

Claro, jugar en el BBVA implicaría una logística compleja y un gasto considerable. Pero pensemos por un momento en el impacto que esto tendría en el equipo. Imaginen a la Máquina jugando en un estadio imponente, con una afición que se desplazaría desde distintos puntos del país para apoyar a su equipo. Sería una inyección de moral, un impulso anímico que podría marcar la diferencia en el terreno de juego.

Además, esta decisión enviaría un mensaje claro a la Liga MX: Cruz Azul no se conforma con migajas, Cruz Azul busca la excelencia en todos los aspectos, dentro y fuera de la cancha. Y qué mejor manera de demostrarlo que eligiendo un estadio de clase mundial como sede temporal.

Ahora bien, aterrizando un poco las expectativas, es probable que la opción del BBVA sea más un deseo que una realidad. Sin embargo, las palabras de Anselmi nos abren la puerta a otras posibilidades. Quizá la directiva esté considerando estadios alternativos en la zona metropolitana, o incluso en ciudades cercanas. Lo importante es que se está buscando una opción que no solo cumpla con los requisitos, sino que también beneficie al equipo en el aspecto deportivo y anímico.

La posibilidad de jugar en CU, la casa de los Pumas, siempre ha generado polémica entre la afición celeste. Si bien es una opción viable por su cercanía y capacidad, el hecho de compartir estadio con el acérrimo rival genera un sentimiento de incomodidad entre muchos cruzazulinos. Las palabras de Anselmi, al destacar el BBVA, parecen restarle fuerza a esta opción, lo cual es una buena noticia para aquellos que no ven con buenos ojos jugar en territorio puma.

En conclusión, las palabras de Martín Anselmi nos invitan a soñar, a imaginar un futuro prometedor para Cruz Azul. Si bien la sede definitiva para los partidos de local aún no está definida, lo que queda claro es que la directiva está buscando la mejor opción para el equipo, una opción que lo impulse a alcanzar sus objetivos. Y si el técnico prefiere un estadio como el BBVA, podemos estar seguros de que se están considerando alternativas ambiciosas.