Se graduó de traidor, le había pedido algo al DT en el duelo entre Chivas y Atlas, no lo hizo, ahora se va del Rebaño

El retiro de Jesús "Chapo" Sánchez del fútbol profesional dejó un sabor agridulce en la afición de Chivas. Un ícono de la institución, campeón en 2017 y referente de la identidad rojiblanca, colgó los botines sin la despedida que merecía. Y es que, su último partido como profesional, el Clásico Tapatío ante el Atlas, lo encontró sentado en la banca, sin ver un solo minuto de acción. Se le habría pedido al DT Arturo Ortega minutos en el campo, no pasó, y ahora deja el Rebaño sin minutos en la fase final donde quedó eliminado el club Guadalajara.

La decisión del entrenador Arturo Ortega de no darle minutos al "Chapo" en un partido tan trascendental ha generado un gran revuelo entre la afición y los medios de comunicación. ¿Por qué un jugador tan emblemático y con tanta experiencia no tuvo la oportunidad de despedirse de su gente en el campo? ¿Fue una falta de respeto por parte del técnico o simplemente una decisión técnica justificada?

Un adiós a medias

El retiro de Jesús Sánchez representa el fin de una era en Chivas. El "Chapo" fue mucho más que un simple jugador, se convirtió en un símbolo de la institución y en un referente para las nuevas generaciones. Su entrega, su profesionalismo y su amor por los colores rojiblancos fueron un ejemplo para todos.

Sin embargo, su despedida dejó un sabor amargo. El hecho de que no haya podido despedirse de la afición en el campo, en un partido tan importante como el Clásico Tapatío, es una mancha en su brillante carrera. Muchos aficionados consideran que Ortega cometió un grave error al no darle minutos al "Chapo", y que esta decisión demuestra una falta de respeto hacia un jugador que tanto ha dado al club.

¿Una decisión técnica o una falta de respeto?

El entrenador Arturo Ortega ha justificado su decisión alegando motivos técnicos. Según el técnico, el equipo necesitaba de otros jugadores para enfrentar el partido ante el Atlas. Sin embargo, esta explicación no ha convencido a la mayoría de los aficionados, quienes consideran que el "Chapo" podía haber aportado mucho al equipo, tanto dentro como fuera del campo.

Algunos analistas han señalado que la decisión de Ortega podría estar relacionada con un proceso de renovación en el equipo. El técnico estaría buscando darle oportunidades a los jóvenes jugadores y, en este sentido, la presencia de un veterano como el "Chapo" podría ser vista como un obstáculo.

Las consecuencias de la decisión

La decisión de no darle minutos a Jesús Sánchez en su último partido podría tener consecuencias a largo plazo para Chivas. En primer lugar, podría generar un ambiente de desconfianza entre los jugadores y el cuerpo técnico. En segundo lugar, podría alejar a los aficionados del equipo, quienes se sienten traicionados por la forma en que se ha tratado a uno de sus ídolos.

Además, la decisión de Ortega podría enviar un mensaje equivocado a las futuras generaciones de jugadores. Si un jugador tan emblemático como el "Chapo" no recibe el reconocimiento que merece, ¿qué pueden esperar los jóvenes talentos que sueñan con jugar en Chivas?

Un llamado a la reflexión

El caso de Jesús Sánchez nos invita a reflexionar sobre el valor de la historia y de las tradiciones en el fútbol. Los jugadores como el "Chapo" son el alma de un club y merecen ser tratados con el respeto que se ganan a pulso.

La directiva de Chivas debe aprender de este error y tomar medidas para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. Es fundamental que el club reconozca la importancia de sus leyendas y que les brinde el homenaje que se merecen.

Conclusiones

La despedida de Jesús Sánchez del fútbol profesional ha sido un momento emotivo para la afición de Chivas. Sin embargo, la forma en que se ha producido ha dejado un sabor amargo. La decisión de Arturo Ortega de no darle minutos al "Chapo" en su último partido ha generado un gran debate y ha puesto en evidencia la falta de sensibilidad de algunos sectores del club.

Es fundamental que Chivas aprenda de esta experiencia y que valore a sus leyendas. El club debe construir un futuro basado en sus raíces y en el respeto por su historia.