Por Javier Vaca
Javier Aguirre, director técnico de la Selección Mexicana, parece haber dejado atrás la etapa de probaturas y ajustes tácticos. Para el crucial enfrentamiento ante Panamá en la final de la Nations League, el "Vasco" presentaría una alineación inicial significativamente distinta a la utilizada contra Canadá, apostando por un once inicial que buscaría un mayor equilibrio en la zona medular del terreno de juego. La recuperación de piezas clave permitiría al estratega mexicano replantear su estrategia y conformar un equipo que buscará imponer condiciones desde el silbatazo inicial. La afición espera un planteamiento sólido y efectivo para conquistar el título.
En la línea defensiva, la selección mexicana contará con el regreso de César Montes, quien cumplió su sanción por acumulación de tarjetas amarillas. La vuelta del central mexicano a la zaga no solo aportará solidez y experiencia en la retaguardia, sino que también permitirá a Javier Aguirre realizar un ajuste táctico importante en el mediocampo. Con Montes nuevamente disponible, Edson Álvarez, un jugador fundamental en el esquema tricolor por su capacidad de recuperación y distribución, podría retornar a su posición natural en el centro del campo, fortaleciendo la contención y el equilibrio del equipo. Este movimiento estratégico podría ser determinante para controlar el ritmo del partido.
La zona medular de la selección mexicana presentaría una cara renovada para la final ante Panamá. A la presencia ya habitual de Edson Álvarez, se sumaría la inclusión de Erik Lira, un mediocampista que goza de la plena confianza de Javier Aguirre por su disciplina táctica y su capacidad para recuperar balones. Pero la sorpresa en el once inicial radicaría en la ubicación de Alexis Vega y Julián Quiñones como interiores. Estos dos jugadores, habitualmente utilizados en posiciones más ofensivas, podrían desempeñar un rol mixto, aportando creatividad en la generación de juego y también colaborando en la presión y recuperación en el centro del campo. Esta apuesta táctica buscaría sorprender al rival y dotar al equipo de mayor dinamismo.
En la ofensiva, Javier Aguirre tomaría una decisión estratégica al no utilizar a los dos delanteros centros de inicio, como ocurrió en el partido anterior. En esta ocasión, Raúl Jiménez sería el encargado de liderar el ataque como único "9" puro, buscando aprovechar su experiencia y capacidad goleadora. Para generar desequilibrio por las bandas y abrir espacios en la defensa panameña, el "Vasco" apostaría por la velocidad y la verticalidad de César Huerta. El joven atacante buscaría explotar su habilidad en el uno contra uno y generar oportunidades de gol para la selección mexicana. Esta configuración ofensiva buscaría maximizar la efectividad del ataque tricolor.
Este sería el once inicial sorpresivo con el que Javier Aguirre buscaría conquistar la Nations League ante Panamá, dejando atrás los experimentos y apostando por un equipo equilibrado y con jugadores de su plena confianza. La afición espera que esta alineación sea la fórmula para alcanzar el tan ansiado título.
25/03/2025
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