Kevin Álvarez es un manojo de nervios y el jugador del América que le reclamó sus imprecisiones ante Cruz Azul

El partido de vuelta de los cuartos de final de la Concacaf Champions Cup entre Cruz Azul y Club América dejó momentos de alta tensión no solo por lo que se jugaba en el terreno de juego, sino también por las frustraciones individuales que afloraron en algunos futbolistas azulcremas. Uno de los jugadores que evidenció imprecisiones en momentos clave del encuentro fue el lateral derecho Kevin Álvarez. A lo largo del partido, Álvarez intentó proyectarse al ataque por su banda, buscando generar opciones ofensivas para el América, pero su falta de precisión en los pases y, sobre todo, en los centros al área, terminó generando molestia en uno de sus compañeros con mayor vocación ofensiva.

Si bien Kevin Álvarez mostró una disposición constante para incorporarse al ataque por la banda derecha, actuando en muchos momentos como un extremo más, sufre de una notoria inconsistencia al llegar a la línea de fondo. En varias oportunidades durante el Clásico Joven, el lateral derecho no logró conectar centros precisos hacia sus compañeros que se encontraban en posiciones ventajosas dentro del área de Cruz Azul. Esta falta de calidad en el último toque terminó frustrando jugadas prometedoras para el Club América, que necesitaba desesperadamente aumentar su cuota goleadora para asegurar su clasificación a las semifinales del torneo continental.

La frustración por la falta de contundencia en el ataque del América, especialmente en las jugadas que involucraban las proyecciones de Kevin Álvarez por la banda derecha, se hizo evidente en el reclamo airado que le propinó el talentoso mediocampista chileno Diego Valdés. Tras una jugada en la que Valdés se encontraba bien posicionado dentro del área de Cruz Azul, esperando un centro preciso de Álvarez, el envío del lateral derecho resultó impreciso y no llegó a su destino. La reacción de Valdés fue inmediata y visible, reclamándole con gestos de molestia la falta de calidad en el centro, evidenciando la frustración por la oportunidad perdida de marcar un gol importante para el equipo.

La falta de contundencia mostrada por el América a lo largo de la eliminatoria contra Cruz Azul fue un factor determinante en su eliminación de la Concacaf Champions Cup. A pesar de generar un buen número de oportunidades de gol tanto en el partido de ida como en el encuentro de vuelta, la falta de precisión en el último toque y la incapacidad para concretar las jugadas terminaron pesando en el marcador global. Esta situación generó una creciente frustración entre los jugadores del América, quienes veían cómo las oportunidades de avanzar en el torneo continental se esfumaban por la falta de efectividad en ataque.

Ante el airado reclamo de Diego Valdés por el impreciso centro, Kevin Álvarez reaccionó con una actitud que algunos interpretaron como resignación o falta de respuesta ante la exigencia de su compañero. El lateral derecho simplemente desvió la mirada hacia el suelo y continuó corriendo para recuperar su posición en la zona defensiva, sin mediar palabra con Valdés. Esta reacción podría ser interpretada como una señal de frustración propia ante sus imprecisiones o como una falta de comunicación efectiva dentro del terreno de juego en un momento de alta tensión para el equipo.

El reemplazo que buscan para Kevin Álvarez

La inconsistencia mostrada por Kevin Álvarez en el costado derecho del Club América ha provocado que pierda protagonismo en el once inicial en algunos partidos. El joven defensor Israel Reyes ha aprovechado las oportunidades para mostrar su solidez defensiva y su capacidad para sumarse al ataque con mayor precisión en los centros, ganándose la confianza del técnico André Jardine y relegando a Álvarez al banquillo en algunos encuentros importantes. Ante este panorama, el América estaría explorando opciones para reforzar la banda derecha en el próximo mercado de verano, con el nombre del mexicano Richard Ledezma, jugador del PSV Eindhoven, como una de las principales opciones, dada su versatilidad para jugar como extremo o lateral por ese sector, posición que agrada al estratega brasileño.