Para garantizar el juego limpio y la seguridad de los jugadores, el fútbol es un deporte que se rige por un conjunto de reglas estipuladas por la IFAB y que la FMF sigue para los partidos de la Liga MX. Entre los aspectos más importantes se encuentran la correcta aplicación de las tarjetas amarillas y rojas, las sanciones por distintas faltas y los procedimientos para ejecutar los tiros libres. Aquí te decimos detalladamente estos puntos clave que conforman el reglamento del fútbol y cómo impactan en el desarrollo de los partidos, cuándo se aplican y más.
La tarjeta amarilla es una advertencia que el árbitro otorga a un jugador cuando comete ciertas infracciones que, si bien no son lo suficientemente graves para justificar la expulsión, ameritan una sanción. En el fútbol, la tarjeta amarilla funciona como un llamado de atención al jugador, indicándole que está al borde de ser expulsado si vuelve a cometer otra falta similar o más grave. Las acciones que pueden resultar en una tarjeta amarilla incluyen la reincidencia en faltas menores después de haber recibido una amonestación verbal, la discusión innecesaria con el árbitro, retrasar el juego deliberadamente, o exhibir un comportamiento antideportivo.
El reglamento del fútbol establece que solo los jugadores, suplentes o miembros del cuerpo técnico pueden ser amonestados con tarjetas amarillas o rojas. La importancia de la tarjeta amarilla en fútbol no debe subestimarse, ya que si un jugador acumula dos tarjetas amarillas en el mismo partido, automáticamente recibe una tarjeta roja y es expulsado del juego. Además, según las reglas del fútbol, los árbitros tienen la autoridad de sancionar desde el inicio hasta el final del partido, incluso en tiempos de reposición o tanda de penales.
Algunas de las razones que terminan en tarjeta amarilla son las siguientes:
La tarjeta roja es una sanción mucho más severa que la amarilla. Se utiliza para expulsar directamente a un jugador del campo de juego cuando comete infracciones graves o reincide en acciones sancionables tras haber recibido una tarjeta amarilla. Entre las principales causas para mostrar una tarjeta roja están las faltas graves, como el juego brusco que pone en peligro a otro jugador, el uso de lenguaje abusivo, acciones violentas, escupir a un rival o a un árbitro, y el uso de las manos para detener un gol intencionalmente.
Cuando se otorga una tarjeta roja, el jugador debe abandonar el campo inmediatamente, y su equipo no puede sustituirlo, lo que genera una gran desventaja. El reglamento del fútbol es claro al respecto: la tarjeta roja expulsa al jugador infractor sin posibilidad de ser reemplazado. Entre las causales de expulsión más comunes encontramos el recibir dos tarjetas amarillas en el mismo partido, cometer faltas violentas, o intervenir de manera ilegal para evitar un gol claro.
En este caso, algunas de las situaciones que pueden terminar en tarjeta roja son estas:
El fútbol se rige por un conjunto de 17 reglas fundamentales, conocidas como las Reglas del Fútbol, aprobadas por la International Football Association Board (IFAB). Estas reglas aplican tanto en competiciones amateur como en las más prestigiosas como la Copa Mundial de la FIFA. Los aspectos que cubren las reglas incluyen desde la correcta marcación del terreno de juego, el número de jugadores permitidos, la duración del partido, hasta las reglas específicas para situaciones como los tiros libres y los penales.
Algunas de las principales reglas del fútbol incluyen la prohibición de tocar el balón con la mano, excepto para los porteros dentro de su área; el número de sustituciones que cada equipo puede realizar, y los tipos de faltas que resultan en sanciones como tiros libres o penales. Estas reglas buscan mantener la integridad del juego, asegurar la equidad entre los equipos y promover el juego limpio en cada competición.
El fútbol cuenta con diversas sanciones que dependen del tipo de infracción cometida por un jugador. Las sanciones más comunes son los tiros libres directos e indirectos, los penales y las tarjetas (amarilla y roja). Un tiro libre directo se concede cuando un jugador comete una falta grave, como dar una patada, empujar o hacer una entrada brusca. En cambio, un tiro libre indirecto se otorga por infracciones menos graves, como obstruir el avance de un oponente sin contacto físico o usar lenguaje inapropiado.
El reglamento del fútbol también contempla sanciones para faltas relacionadas con el uso de las manos. Si un jugador toca el balón intencionalmente con la mano para interferir en el juego o impedir un gol, se concede un tiro libre directo o incluso un penal si la falta se comete dentro del área. Además, las sanciones disciplinarias, como las tarjetas amarillas y rojas, se aplican cuando los jugadores violan las reglas del juego de manera reiterada o intencional, afectando el desarrollo del partido.
Sanciones que existen en el fútbol actualmente:
Un tiro libre en fútbol se concede cuando un jugador comete una infracción en el campo que no amerita un penal, pero que debe ser castigada. Existen dos tipos de tiros libres: los directos y los indirectos. Un tiro libre directo permite al equipo que lo ejecuta disparar directamente a la portería con el objetivo de marcar un gol, mientras que en un tiro libre indirecto, el balón debe tocar a otro jugador antes de poder dirigirse al arco.
La ejecución de un tiro libre debe realizarse desde el lugar donde ocurrió la falta, y los jugadores del equipo rival deben mantenerse a una distancia mínima de 9.15 metros del balón. Además, el equipo que ejecuta el tiro libre tiene la oportunidad de crear jugadas tácticas que pueden resultar en goles o generar peligro en la portería contraria. Según el reglamento del fútbol, los tiros libres son esenciales para mantener el orden y el juego limpio dentro del terreno.
En el fútbol existen distintos tipos de faltas, cada una con sus respectivas consecuencias. Entre las más comunes están las faltas imprudentes, en las cuales el jugador comete una infracción menor sin intenciones maliciosas. Estas faltas suelen ser sancionadas con un tiro libre indirecto. Las faltas temerarias son aquellas en las que el jugador no considera los riesgos para su oponente, lo que puede resultar en una amonestación con tarjeta amarilla.
Por otro lado, las faltas graves, como las entradas violentas o el uso excesivo de la fuerza, conllevan sanciones más severas, como la tarjeta roja directa y la expulsión del infractor. Además, existen infracciones como el uso de la mano para impedir un gol o escupir a un rival, que también son sancionadas con la tarjeta roja. El reglamento de fútbol clasifica claramente las faltas según su gravedad, garantizando que se mantenga la equidad y seguridad en el campo.
Las reglas y sanciones del fútbol están diseñadas para proteger la integridad del juego y asegurar la justicia en cada partido. Ya sea mediante la amonestación con tarjeta amarilla, la expulsión con tarjeta roja, o la concesión de tiros libres y penales, los árbitros tienen la responsabilidad de aplicar el reglamento de fútbol de manera imparcial. Las faltas y sanciones en el fútbol no solo buscan castigar el comportamiento antideportivo, sino también mantener el juego dentro de los límites establecidos por la IFAB.
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