Real Madrid vino por un jugador de la Liga MX, pero el club se negó a venderlo, así lo relató el propio mexicano

Real Madrid vino a buscar a Andrés Guardado después de su debut en el Mundial del 2006, pero el Atlas se negó a venderlo ya que habrían ofrecido menos de 1 millón de dólares, además de que lo iban a mandar a la filial Real Madrid Castilla, algo de lo que el propio dijo arrepentirse.

Andrés Guardado es uno de los futbolistas mexicanos más exitosos de la historia, y su carrera en Europa ha sido un testimonio de su calidad, longevidad y consistencia en el fútbol internacional. A lo largo de su carrera, ha jugado en varios de los clubes más importantes de Europa, destacándose como un centrocampista talentoso, versátil y un referente tanto en su club como en la selección nacional de México.

Inicio en Europa: Deportivo La Coruña (2007-2012)

El viaje europeo de Andrés Guardado comenzó en 2007, cuando dejó Atlas, su club de origen en México, para unirse al Deportivo La Coruña en LaLiga de España. Desde su llegada a Galicia, Guardado mostró su capacidad como extremo izquierdo, destacándose por su habilidad técnica, su velocidad y su capacidad para centrar balones peligrosos.

Durante sus cinco años en el Deportivo, Guardado se convirtió en uno de los jugadores más importantes del equipo, ayudando al club a mantener su categoría en LaLiga y ganándose el reconocimiento tanto en España como en México. En este período, fue nombrado capitán del equipo y también fue llamado a la selección mexicana para participar en varias ediciones de la Copa del Mundo y Copa América.

Real Madrid y Valencia (2012-2015)

En 2012, Guardado dio un paso más en su carrera europea al fichar por el Valencia CF, uno de los clubes más grandes de España. En Valencia, su rol evolucionó de un extremo a un centrocampista más central, donde pudo aprovechar su visión de juego, su capacidad de distribución y su destreza en los tiros libres. Sin embargo, a pesar de sus buenas actuaciones, las lesiones y la competencia interna lo mantuvieron en un rol menos destacado en algunos momentos.

Aunque su tiempo en Valencia no estuvo marcado por los mayores logros de su carrera, Guardado siguió demostrando su calidad y su versatilidad, lo que lo mantuvo en la élite del fútbol español. Fue titular en varias competiciones y siguió siendo una pieza clave de la selección mexicana en su paso por el club.

La Apuesta por el PSV Eindhoven (2015-2017)

El cambio más significativo en la carrera de Guardado llegó en 2015, cuando fichó por el PSV Eindhoven de los Países Bajos. En el PSV, Guardado vivió una de las etapas más destacadas de su carrera europea. Bajo la dirección de Phillip Cocu, se consolidó como titular indiscutido, desempeñándose principalmente como mediocentro, donde pudo explotar su gran capacidad de pase y su habilidad para generar juego desde el centro del campo.

Durante su estancia en el PSV, Guardado fue parte fundamental del equipo que ganó la Eredivisie 2015-2016, logrando así su primer título de liga en Europa. Su desempeño también fue clave en la Liga de Campeones de la UEFA, donde el PSV mostró una notable competitividad a nivel continental. Su paso por el PSV consolidó su estatus como uno de los mejores centrocampistas mexicanos en Europa, y su crecimiento como líder en el vestuario y dentro del campo fue evidente.

Betis: El Último Gran Desafío en España (2017-2023)

En 2017, Andrés Guardado firmó con el Real Betis Balonpié, donde continuó su carrera en LaLiga española. En el Betis, Guardado se adaptó a un rol más profundo en el mediocampo, donde su experiencia y su capacidad para controlar el ritmo del juego fueron esenciales para el equipo. A pesar de sus años avanzados en comparación con otros jugadores más jóvenes, Guardado siguió siendo un futbolista clave para el Betis, jugando en muchas ocasiones como titular y siendo una de las piezas fundamentales del esquema táctico de Manuel Pellegrini, entrenador del club.

Durante su tiempo en el Betis, Guardado vivió momentos inolvidables, como la clasificación a competiciones europeas y la consolidación del club como una de las fuerzas competitivas en España. Además, su liderazgo en el vestuario fue crucial para el equipo, y su presencia en los partidos importantes continuó siendo una ventaja para el Betis