Por Luis Estrello
Mientras algunos medios hablan que Javier Hernández ha firmado un contrato de poco más de 700 millones de pesos al año (3.5 MDD) Armando González, promesa del equipo rojiblanco según el portal Salary Sports apenas tendría un ingreso de poco más de 228 mil pesos anuales, lo cual representa una impresionante brecha salarial provocada por la gran trayectoria de la leyenda rojiblanca.
La llegada de Javier Hernández a Chivas generó una gran expectativa en la afición rojiblanca. Su experiencia y trayectoria internacional prometían un salto de calidad en el ataque del equipo. Sin embargo, el surgimiento de jóvenes talentos como Armando González ha agregado un nuevo elemento a la ecuación, presentando una interesante comparación entre dos generaciones de delanteros.
Chicharito, como se le conoce popularmente, llegó a Chivas con el peso de ser uno de los máximos goleadores mexicanos de la historia. Su experiencia en grandes ligas como la Premier League y la Bundesliga, sumada a su instinto goleador, lo posicionaban como el referente del ataque rojiblanco. Sin embargo, su adaptación al futbol mexicano no ha sido sencilla, y las lesiones han limitado su participación. A pesar de ello, su presencia en el equipo ha sido fundamental para elevar el nivel de juego y motivar a sus compañeros.
Por otro lado, Armando González representa la esperanza de un nuevo ciclo en el ataque de Chivas. Surgido de las fuerzas básicas, el joven delantero ha demostrado un gran potencial y una adaptación rápida al primer equipo. Su velocidad, desborde y capacidad para generar peligro por las bandas lo convierten en una amenaza constante para las defensas rivales. González ha sabido aprovechar las oportunidades que se le han presentado y se ha ganado un lugar en el corazón de la afición.
Si bien ambos jugadores comparten el deseo de triunfar con Chivas, sus estilos de juego son bastante diferentes. Hernández es un delantero centro clásico, con una gran capacidad para definir las jugadas y un excelente juego aéreo. González, por su parte, es un extremo con una gran movilidad y habilidad individual, capaz de desbordar por las bandas y asistir a sus compañeros.
La coexistencia de Hernández y González en el ataque de Chivas representa un relevo generacional interesante. La experiencia del máximo goleador histórico de la Selección Mexicana se combina con la juventud y el talento del canterano rojiblanco. A medida que González vaya madurando y ganando experiencia, es probable que asuma un rol protagónico en el equipo, mientras que Hernández continúe aportando su experiencia desde el banquillo o en un rol más secundario.
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