Por Julio Salas
Muchos futbolistas a lo largo de la historia han abandonado la élite luego de brillar durante largo tiempo en los mejores equipos del Mundo. Este caso es uno de ellos y resulta llamativo, ya que tocó el cielo al ganar el Mundial con Zinedine Zidane en 1998, pero además se convirtió en ídolo del Bayern Munich por jugar allí entre 1997 y 2006, casi diez años en los que jugó más de 200 partidos.
El futbolista en cuestión del que hablamos en esta nota disputó en total 97 partidos con la selección de Francia, y además de conquistar el Mundo en 1998, ganó la Eurocopa del 2000. Se trata de Bixente Lizarazu, quien tras retirarse del fútbol en 2006 tras una exitosa carrera, decidió dedicarse al jiu-jitsu brasileño. En este deporte se consolidó logrando incluso ser campeón europeo, por lo que sorprende a todos como Lizarazu cambió rotundamente su vida.
Ganar una Copa de Mundo no es poca cosa, de hecho, es el máximo sueño de cada niño que comienza a patear un balón en el parque o en su casa. Lo mismo significa la UEFA Champions League a nivel clubes, pero algunos de los que logran ganarlas se quedan sin sueños pendientes, por lo que como Bixente Lizarazu buscan nuevos horizontes para conquistar.
El ex lateral izquierdo francés, que acumuló un total de 17 títulos con el Bayern Munich, incluída una Champions League en la temporada 2000/01, dijo que llegar al jiu-jitsu lo hizo tan feliz como cuando se ataba los botines con 18 años antes de entrar a jugar al fútbol. Lizarazu reveló en sus redes sociales que practica muchos deportes menos fútbol tras su retiro.
22/11/2024
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